Ya está. Ya he comprado la tela de todos los frailes. Joder cómo pesa!!
Van a quedar geniales los vestidos de los monjes. Susana está haciendo un trabajo increíble. Así da gusto. Me muero de ganas de ensayar con el hábito. Seguro que me dará mucha energía. El otro día, probándome el prototipo ya me sentía algo religioso... Y estaba hecho con una sábana!! No Santa, claro...
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Ya veo que te has ido de trapitos...!
ResponderEliminarTambién yo me mueeeeero por ver algo.
Ayer, no antedeayer me llamaron para ver la posibilidad de que dirigiese un concurso en la dos de Andalucía (Canal 2).
Joder, como me salga me pillo un avión o un ave y voy pallá.
Es cierto lo que dices de que el proceso de tansformación de Jacobo es intenso, fuertte, arriesgado: del terror a la empatía.
Tal vez hay ahí un paso intermedio que te puede ayudar a comprenderlo: la caridad cristiana.
Jacdobo es profundamente creyente (no ha conocido otra cosa) y esa caridad cristiana mezclada con la idea evangélica de poner siempre la otra mejilla y estar al servicio de los demás puede ser la palanca (Arqúímedes dixit) que le transporte desde el terror hasta la empatía.
E este sentido, lo primero que vemos de Jacobo, el hecvho de pedirle al prior que le releve es, más que un acto meditado, una rabieta. Es un "no puedeo más no lo aguanto fíjese padre lo que acaba de hacerme!!!!" Que termina reconvertido en un "lo que tusted diga padre" por la reverencia que siente ante el prior y por lo asumido que tiene que es "su cruz y que don Juan es un pobre viejo, y como decía Jesús, lo que a alguno de estos desgraciados hagáis a mí me lo hacéis"
Bueno, animo.
Y fuerza y ánimo para María a la que no olvido en mis oraciones pues manda cojonees luchar con fray Miquel, y más cuando se siente inseguro.
Un abrazo para los dos. No, mejor una pa cada uno.