sábado, 27 de junio de 2009

DON JUAN. DIARIO DE UN NÁUFRAGO. 60

Décimocuarta actuación

Vuelta a la carretera, vuelta la tranquilidad del viaje. Saber que los bultos están conmigo y que cuando llegue a destino todos estaremos juntos: Xavi, el espectáculo y yo...

Y vuelta al placer de actuar para un público que comprende y disfruta cada una de las palabras que digo. Casi había olvidado lo que era eso. La escucha.
Y es que en Brasil había llegado a desarrollar un sistema de autodefensa, inconscientemente descubrí las partes del espectáculo que el público disfrutaba más por la comprensión, y había modificado el tempo de algunas pasajes para facilitar el ritmo del conjunto.
Aquí, ayer, fue un placer volver a sentir cada palabra como un mensaje claro hacia el público, y notar por otro lado, esa exigencia de la dicción, saber que cada expresión, cada verso, estaba siendo analizado por un público exigente, acostumbrado a oir texto en castellano y que escuchaba con una profundidad a veces inquietante.

Un gusto actuar en un festival de teatro, y una sorpresa la gran acogida que hemos tenido.
Y es que creo que se está perdiendo una parte importante de nuestra profesión. Comunicar, conmover, contar... todo empieza por co... Y el placer de la artesanía que representa medir cada palabra, buscarla en las tripas (ya me lo decía Jaime...) y expresarla con mimo. Cuidar todos los detalles, ser honesto con las posibilidades de uno y no embarcarse en viajes que nos seamos capaces de llevar a puerto. Buscar ese punto de equilibrio, pero sin hacer ascos al riesgo, decir lo que uno piensa pero sin menospreciar al que lo escucha... intentar crear un acto de disfrute común y no un orgasmo personal... Sí, creo que eso se está perdiendo, y cada vez buscamos más otras cosas que no alcanzo a comprender pero que está claro que están acabando de a poquito con el placer de ir al teatro...
Y cada vez hay más teatro comercial, teatro que llega al espectador con un envoltorio espectacular, que requiere grandes inversiones económicas para desarrollar puestas en escena que impacten al espectador y que a la vez tengan contenidos "fáciles". No discuto el mérito de estos espectáculos, pero creo que es desmesurada la desproporción entre el dinero que se invierte y el contenido que se adivina.
Aunque en ocasiones, lo más vergonzoso es ver espectáculos que no van mucho más allá del estreno y en los que se han gastado millonadas con las espaldas cubiertas por subvenciones vergonzantes. Por qué no se exige más a los espectáculos...? Tanto dinero te damos de subvención... tantos bolos exigimos como contrapartida...
En fin,, que se me va la olla...

Un gustazo actuar aquí en Alcalá que espero que hoy continúe...

3 comentarios:

  1. Hola Miquel,
    intuyendo la maravilla que te traes entre manos, te saqué a toda página en el número de La Linterna de mayo, cuya portada fue Titirimundi y desgraciadamente no pude ir a verte. Lo intenté después en La Abadía, pero de nuevo surgieron cosas que me lo impidieron... Y finalmente el viernes vi tu Don Juan en Alcalá.
    Yo era una de las que, desde primerísima fila, escuchaban y miraban con una profundidad inquietante porque TODO (hasta ese sudor que tuvo que ser de lo más incómodo) me pareció perfecto. Desde la primera letra del título hasta el último saludo: cada luz, cada palabra y cada gesto parecían estar tocados con algo especial que no se puede definir fácilmente. Es algo que te llega hasta las entrañas... al menos a mi.
    Las palabras de la muerte dando respuesta al desesperante "¿Qué queréis de mi si no puedo ser de otra manera?" de un Don Juan que acepta su destino hasta el último momento son tan maravillosas que no puedes más que salir del teatro sabiendo que has presenciado una obra de arte de las grandes.
    Relájate, no te presiones tanto para que llegue como nos llega a algunos, porque tu forma de comunicar nunca será la que falla... Es que hay almas que no sienten de la misma manera, aunque ahí les queda esa semilla, ese mundo que muestras, esa gran labor actoral, esa ternura hecha títere... todo. No dudes nunca. Haces un trabajo increíble de principio a fin.
    Espero poder verla otra vez.
    Mucha suerte y un fuerte abrazo.
    Cristina

    ResponderEliminar
  2. Joder Cristina... No es justo. No puedes entrar aquí y decir unas cosas tan... maravillosas y dejarme tan profundamente emocionado y no haberme dado la oportunidad de conocerte... No sabes cómo te agradezco estas palabras que desde ahora llevo grabadas bien adentro. Y te agradezco también el sacarme en La Linterna(por supuesto guardo un par de ejemplares...) Y quiero además compartir esos elogiosos comentarios con todos los que hay detrás de este proyeco y que trabajaron muy duro y a la vez muy felices y que comparten conmigo la escena en cada función... Empezando por María, la directora y mi compañera, que ha compartido aquí junto a mí la alegría de leer tus comentarios... pero siguiendo por todos, a los que encontrarás mirando la ficha artística del espectáculo. Los poros por los que emanaba el sudor eran míos... el sudor era de todos ellos.
    Espero conocerte muy pronto.
    MUCHAS GRACIAS Y UN FUERTE ABRAZO!!!

    ResponderEliminar
  3. Gracias a ti por regalarnos algo tan bello... Gracias a vosotros! Disculpad la segunda persona, quizás es por resumir y también porque la presencia de Miquel en el escenario es apabullante, pero desde luego que se nota que hay un trabajo compartido entre gente pletórica de pasión, profesionalidad y complicidad.
    Enhorabuena a todos!
    Yo también espero conoceros algún día.
    Un abrazo!
    Cristina

    ResponderEliminar